El presidente panameño, José Raúl Mulino, informó este domingo que en la reunión con el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, le trasladó que «la soberanía de Panamá no está en cuestión».
Así lo detalló el mandatario en una comparecencia de prensa tras la reunión con Rubio, que se produjo en medio de las amenazas del presidente estadounidense, Donald Trump, de recuperar el control estadounidense de esa vía en represalia por la supuesta influencia china.
No cabe duda de que el canal es operado por nuestro país y así seguirá siendo», declaró el mandatario, quien no ve una «amenaza real» de que Estados Unidos pudiera utilizar la fuerza militar para tomar el control de la infraestructura.
No siento que haya ninguna amenaza en estos momentos real contra el tratado, la vigencia, y mucho menos de uso de fuerza militar para apoderarse del Canal», aseguró Mulino.
«¿Pueden estar tranquilas las personas?», le preguntaron entonces. «Yo diría que sí», respondió.
Mulino afirmó que la «reunión fue altamente respetuosa y cordial» y opinó que se abrió «un camino para la construcción de una nueva etapa en la relación» entre ambos países.
«No sentí para nada un clima de controversia ni de irrespeto, sentí un clima muy proactivo», afirmó.
El mandatario intentó disuadir las presiones de Trump, quien en pocos días en el cargo ha cumplido con sus amenazas contra otros países, como la guerra comercial lanzada contra México, Canadá y China.
Según el mandatario, corresponde a las autoridades del Canal de Panamá, por la autonomía de la que disponen por mandato constitucional, y no a su Gobierno, «aclarar todas las dudas» que la Administración de Trump sobre la gestión de la vía.
Según el mandatario, la preocupación de fondo de Estados Unidos está en los puertos de Balboa y Cristóbal, ubicados a ambos lados del Canal y operados por una empresa china.
Al respecto, Mulino comunicó a Rubio que por primera vez hay en marcha una gran auditoría sobre la gestión de los puertos y le pidió esperar a que haya resultados.
«Tales dos puertos pertenecientes a una misma empresa son auditados y como corresponde, debemos esperar a que termine para sacar las conclusiones legales y actuar en concordancia», dijo.
Mulino le comunicó a Rubio, además, su intención de no renovar el acuerdo con China sobre la nueva Ruta de la Seda.
También propuso ampliar el pacto con Estados Unidos para la deportación de migrantes en vuelos financiados por Washington.
Marco Rubio exigió a José Raúl Mulino «cambios inmediatos» para contrarrestar la supuesta influencia china en el Canal de Panamá.
«El secretario Rubio dejó en claro que este ‘statu quo’ es inaceptable y que, a falta de cambios inmediatos, Estados Unidos tendría que tomar las medidas necesarias para proteger sus derechos bajo el Tratado», señaló el Departamento de Estado en un comunicado.